Empleo “a voluntad”: definición, ventajas y desventajas
El empleo «a voluntad» significa que un empleador puede despedir a un empleado en cualquier momento, y un empleado puede dejar un puesto por cualquier razón sin ramificaciones legales. Este acuerdo puede dar flexibilidad tanto al empleador como al empleado, pero resulta en escasez de trabajo o personal. Después de examinar las ventajas y desventajas de la naturaleza «a voluntad» del empleo, este post de discusión argumentará que unirse a los sindicatos es una de las soluciones para las desventajas del empleo a voluntad.
Algunas de las principales ventajas de los arreglos a voluntad son la simplicidad del proceso de terminación y el aumento de la productividad de los trabajadores. Como los empleados no explican el motivo del despido, su proceso no requiere un papeleo excesivo, por lo que se vuelve más rápido (Bodie, 2017). Además, no está obligado por obligaciones contractuales; las empresas se adaptan rápidamente a los cambios en el entorno y redirigen sus recursos para aumentar la productividad. Del mismo modo, los empleados pueden elegir un empleador que se corresponda con sus expectativas. Por lo tanto, la naturaleza «a voluntad» del empleo es ventajosa debido a su libertad para los empleadores y los empleados.
Sin embargo, la libertad puede ser desventajosa si causa alguna escasez de mano de obra o abuso de los derechos laborales. Cuando un empleado tiene la oportunidad de abandonar la empresa en cualquier momento, esta incertidumbre puede causar una escasez de reemplazos competentes (Hijal-Moghrabi & Berman, 2017). Del mismo modo, bajo la presión o el miedo de perder repentinamente su trabajo, los empleados pueden dudar en expresar sus preocupaciones con respecto al puesto. Además, los empleados podrían ser despedidos para ser reemplazados por algunas redes corruptas del empleador. Es por eso que el empleo a voluntad puede ser arriesgado.
Los empleados pueden beneficiarse de unirse a los sindicatos con los riesgos bajo el empleo a voluntad. Los miembros del sindicato son un 28 por ciento más que sus contrapartes no sindicales en promedio (Ahlquist, 2017). En general, los sindicatos empoderan a los trabajadores para que tomen medidas para mejorar las condiciones de trabajo y otros beneficios, como seguros o atención médica.