Un análisis exhaustivo de la violación en entornos correccionales
Introducción
La violación en entornos correccionales es un tema de creciente preocupación. Las violaciones han sido un gran problema en los Estados Unidos de América. En el país, se denuncian más de 17.000 violaciones al año, con un 76% de víctimas femeninas (Martyniuk, 2014). Muchas personas ponen en tela de juicio el hecho de si la violación se produce o no en las cárceles debido a la dinámica de poder y los privilegios que están presentes. La idea de que la agresión sexual es una ocurrencia común en los entornos correccionales no es nada nuevo; sin embargo, las personas habían tratado de minimizar las ocurrencias de este crimen al presentar historias de encubrimiento cuando fueron descubiertas por primera vez. La cuestión de la violación en entornos correccionales ha sido un problema persistente. Además, los estudios han demostrado que las mujeres que regresan a la cárcel después de cumplir sus condenas por agresión sexual contra sus víctimas pueden ser violadas por otros presos o guardias (Worley et al., 2010).
El sistema de justicia penal es conocido por violar los derechos humanos de los presos. Las mujeres y los hombres son tratados como entidades separadas en lugar de ser vistos como iguales. El tratamiento de las mujeres en prisión varía significativamente de un estado a otro y de una prisión a otra. Algunos estudios han etiquetado los actos brutales de prisión como agresión sexual (Fedock et al., 2016). La agresión sexual y la violación se han vuelto más sofisticadas con respecto a la forma en que son cometidas y toleradas por los encarcelados e incluso por aquellos en posiciones de poder dentro de estos sistemas. Este documento se centrará en examinar cómo el género y la orientación sexual afectan a ser víctima de agresión sexual en entornos correccionales. Se llevará a cabo a través de revisiones de la literatura de revistas de criminología, encuestas administradas a los reclusos en las cárceles y entrevistas personales con reclusos que han sufrido agresiones sexuales.
Revisión de literatura
En los Estados Unidos, la violación es cualquier actividad sexual contra una persona sin su consentimiento. La violación en prisión no es diferente; las condiciones en las que se recluye a los presos pueden aumentar la probabilidad de violación en el interior. Los datos muestran muchos impactos negativos en las personas que experimentan agresión sexual en prisión (Downer & Trestman., 2016). Estos impactos incluyen el trastorno de estrés postraumático (TEPT), el abuso de sustancias, la ansiedad y la depresión. Estos problemas pueden estar relacionados con la violación, pero algunos también pueden ser causados por otros factores, como la violencia y las pandillas. Martyniuk encontró que el 80% de las mujeres en prisión reportaron haber sido agredidas sexualmente por otras mujeres. Esta estadística no es sorprendente dado que las reclusas a menudo se colocan juntas en lugares cerrados donde pueden ser fácilmente victimizadas. Kubiak et al. el 53% de las mujeres negras que fueron violadas durante su tiempo encarceladas informaron haber sido violadas en grupo por guardias masculinos. La evidencia sugiere que la violación en prisión es un problema tanto para los hombres como para las mujeres y las minorías raciales.
Otro estudio encontró que los hombres tenían más probabilidades de reportar haber sido violados que las mujeres mientras estaban encarcelados (Dumond, 2003). Sin embargo, al observar a aquellos que denunciaron haber sido agredidos sexualmente pero fueron absueltos, era más probable que las mujeres que los hombres dijeran que fueron violados (Dumond, 2003; Struckman-Johnson et al., 1996). Sugiere algunas diferencias entre los géneros cuando se trata de experimentar agresión sexual mientras está en prisión; sin embargo, ambos géneros experimentan tasas similares de violación. Además, Dagan & Teles descubrió que la más obvia depende del tipo de prisión y de cómo tratan a los reclusos. Por ejemplo, algunas prisiones son más violentas que otras, lo que hace más probable que las reclusas sean violadas.
En general, la violación en prisión es un problema grave, y la revisión de la literatura sobre este tema es extensa. Estos estudios han demostrado que aunque muchos reclusos se identifican como homosexuales o transgénero, la mayoría todavía no considera estas identidades al considerar cómo prevenir la violación en prisión. En cambio, las personas deberían centrarse más en educar a los miembros del personal sobre la mejor manera de proteger a las poblaciones vulnerables, como las personas trans con recursos limitados, a quienes otros reclusos a menudo se dirigen debido a su falta de educación o conciencia sobre las medidas de prevención de la agresión sexual.
Cuestión de investigación e hipótesis
La pregunta de la investigación es: ¿afecta el género / la sexualidad a quién es violado en la cárcel? Esta pregunta es crucial porque nos ayudará a determinar si existe o no un vínculo entre género / sexualidad y quién es violado en las cárceles. La hipótesis establece que el género afecta a quienes son violados en prisión porque los hombres tienen más probabilidades de ser agredidos sexualmente que las mujeres mientras están encarcelados (Arkles, 2014). La causa de esta disparidad no está clara; sin embargo, una posible explicación es que los hombres son más propensos a cometer actos de violencia sexual que las mujeres contra otros reclusos o miembros del personal (Stemple & Meyer, 2014; Eigenberg, 1998). Una segunda posible explicación puede ser que los presos varones tienen más poder que las mujeres, ya que a menudo se les asignan puestos de trabajo con mayor responsabilidad y acceso a las armas dentro de la instalación.
Muestreo y justificación para el estudio
La fuente de datos para este trabajo de investigación será la Encuesta Nacional de Reclusos de la Oficina de Estadísticas de Justicia. Esta encuesta, realizada anualmente, recopila información sobre las experiencias de los reclusos con agresiones sexuales en establecimientos penitenciarios. Incluye preguntas sobre si las reclusas fueron violadas y con qué frecuencia fueron victimizadas. También incluye información sobre si el delincuente era otro preso o miembro del personal y si hubo otras víctimas en el incidente. El tamaño de la muestra para este estudio será de 500 presos en prisiones federales que sufrieron agresión sexual mientras estaban encarcelados. La justificación para elegir este tamaño de muestra fue que queríamos asegurarnos de que teníamos suficientes personas para que nuestros hallazgos fueran confiables y precisos. También queríamos que suficientes personas descompusieran cualquier patrón que pudiera surgir después de mirar los datos, dándonos más información sobre lo que está sucediendo detrás de las rejas.
Diseño de Investigación
El diseño de la investigación utilizada en este estudio será cualitativo. Se elige porque permite un análisis en profundidad de las experiencias de violación en prisión y el contexto cultural y social que rodea estas experiencias. Entre los participantes había reclusos y reclusas, así como miembros del personal de diferentes centros penitenciarios. Este diseño permite una gran cantidad de información sobre las muchas facetas de la cultura de la violación en prisión y cómo esa cultura afecta a las personas que son violadas. Mediante el uso de entrevistas con los participantes y las observaciones de su comportamiento, el investigador podrá ver cómo sus perspectivas sobre los roles de género y las prácticas sexuales afectaron la forma en que se vieron a sí mismos y a los demás durante estos eventos traumáticos.
Cuestiones éticas
Es importante tener en cuenta que las cuestiones éticas deben tenerse en cuenta al realizar este tipo de investigación. Los problemas éticos que se pueden enfrentar al realizar esta investigación son dobles. En primer lugar, está la cuestión de la confidencialidad en torno a cualquier información personal que pueda ser compartida con el investigador durante este proyecto. En segundo lugar, está la cuestión de proteger la seguridad de los demás en el grupo de estudio a lo largo del tiempo.
Variables
La variable independiente será la orientación sexual: si la persona encuestada se identifica como heterosexual u homosexual. La variable dependiente será si han sido violadas por otros reclusos o por miembros del personal del centro penitenciario donde viven. Para medir estas variables, el estudio utilizará encuestas y entrevistas con reclusos y oficiales correccionales en cada instalación para determinar qué tan generalizados están estos problemas y qué factores están asociados con ellos, como el tipo de instalación.
Tipo de medidas
Las medidas utilizadas fueron: Encuestas, Grupos focales, Entrevistas y Datos observacionales. Los datos de la encuesta se recopilarán a través de un cuestionario en línea distribuido a los presos en todo Estados Unidos. Los datos de los grupos focales se recopilarán entrevistando a reclusos y reclusas en diferentes instalaciones en todo el país. Las entrevistas se llevarán a cabo con reclusos y reclusas de diferentes prisiones de todo el país que habían sido agredidos sexualmente mientras estaban encarcelados. Los datos de observación se recopilarán observando las interacciones entre los reclusos varones entrevistados para este estudio y las interacciones entre los reclusos varones en celdas de observación en diferentes instalaciones en todo el país.
Elementos
Validez externa
La generalización de los resultados de un estudio a diferentes contextos o grupos es lo que significa cuando se habla de validez externa. Qué tan bien los hallazgos del estudio se generalizan a los contextos del mundo real es una medida de validez externa. Es crucial porque los estudios con poblaciones limitadas o tamaños de muestra no pueden generalizar sus hallazgos a otras situaciones. Es bueno porque tiene un tamaño de muestra grande e incluye una variedad de entornos penitenciarios. Los participantes también fueron diversos en cuanto a género, edad y orientación sexual. La muestra también será relativamente grande para una encuesta en línea y se comparará con estudios similares que utilizan métodos similares. Por lo tanto, este elemento es una fortaleza para el estudio.
Validez del contenido
La validez del contenido es una medida del grado en que el contenido de un estudio refleja los fenómenos que pretende estudiar. La validez del contenido se evalúa comparando el contenido de un estudio con la teoría y la investigación existentes sobre ese tema y si los datos respaldan o no las conclusiones extraídas por los investigadores. Este elemento es una fortaleza para el estudio porque utilizará la teoría y la investigación existentes de otros estudios sobre este tema. Lo más importante es que utilizará publicaciones revisadas por pares como fuente para la investigación. Debido a esto, el estudio será legítimo con respecto a su validez de contenido.
Procedimiento de muestreo
El procedimiento de muestreo es un método para seleccionar una muestra de una población para que las características o eventos dentro de esa población estén más estrechamente asociados con esas características o eventos que si se toman muestras aleatoriamente de toda la población. Este elemento metodológico será una fortaleza para el estudio porque ayuda a explicar por qué es esencial para la investigación seleccionar a los participantes en función de su género y sexualidad. Es probable que estos factores sean más relevantes al examinar la violación dentro de los entornos penitenciarios que si eligiera al azar a los participantes de toda una población.
Fiabilidad en las mediciones de variables
La confiabilidad en las mediciones de las variables se refiere a la consistencia o repetibilidad de un tamaño. Es especialmente importante cuando se mide algo que no se mide fácilmente, como la agresión sexual. La fiabilidad del estudio se asegurará mediante el uso de un método cualitativo, por lo tanto, este elemento será una fortaleza para el estudio. El investigador utilizará entrevistas, grupos focales y encuestas para recopilar información de los participantes sobre sus experiencias con la agresión sexual en entornos correccionales. El investigador también recopilará información sobre la cantidad de tiempo que tardan los agentes de policía en responder después de que se realiza una llamada de emergencia y la frecuencia con que los reclusos son agredidos sexualmente mientras se someten a programas de rehabilitación diseñados para frenar su comportamiento criminal.
Conclusión
No es exagerado decir que los prisioneros y guardias se involucran coercitivamente en actos sexuales con una frecuencia mucho más alta que la población general. Si bien se puede saber que la violación en prisión es un problema grave y endémico, parece que el estudio en cuestión prestará una atención muy necesaria al asunto a través de sus hallazgos, así como sus aplicaciones prácticas para ayudar a reducir la tasa de agresiones. Los que corren más riesgo en las instalaciones correccionales son jóvenes y atractivos, en particular los reclusos homosexuales y transgénero. Si bien este estudio es especialmente crucial porque aborda un problema nacional, es probable que tenga poco efecto en la reducción de la incidencia de la violación en prisión.
El mensaje de “llevar a casa” de este trabajo de investigación es que la violación ocurre en entornos correccionales. A pesar de las restricciones del entorno carcelario, los reclusos aún encuentran formas de participar en encuentros sexuales con otros reclusos. Este comportamiento se produce por una variedad de razones. Estas razones incluyen; apego emocional, trastornos psicológicos y orientación sexual. Las personas que están en prisión por cometer agresión sexual o tienen inclinación sexual pueden ser más propensas a cometer una violación nuevamente. Los métodos ideales para disminuir la violación de reclusos incluyen: cámaras de vigilancia, programas educativos, servicios específicos de género y terapia de modificación de la conducta.
Recientemente, una sorprendente cantidad de guardias de prisiones de abuso sexual han sido condenados por actos de violencia sexual hacia los reclusos. Es preocupante que tengamos guardias de prisiones, personas que se supone que son responsables del bienestar de los presos y en situaciones que se supone que deben permanecer completamente imparciales, aprovechando su poder y perjudicando a las mismas personas que se supone que deben proteger. La idea de que la historia se repite está personificada por este problema obvio. Es por eso que este proyecto ha sido tan importante no solo para estudiar los hechos, sino también para resaltar las implicaciones que surgen de los hechos para exponer los problemas y encontrar formas de resolverlos.