Mejorar el acceso a la salud mental: análisis de políticas para 2021
Introducción
El problema de la salud mental y la terapia con medicamentos es uno de los problemas agudos en los Estados Unidos. Durante las últimas décadas, ha habido un aumento gradual en el número de personas con enfermedades mentales (Ijadi-Maghsoodi et al., 2018). La situación empeoró durante los últimos dos años, ya que el encierro puso a las personas bajo estrés extremo. El sistema médico de los Estados Unidos no estaba listo para ayudar a muchas personas que experimentaron trastornos mentales agudos (Robinson & Daly, 2021). A pesar de que el aumento de los problemas psicológicos asociados con la pandemia ha pasado, esta situación reveló fallas críticas en la atención médica. En este documento se discutirán las políticas que promueven el acceso a la salud mental.
Componentes clave e historia de la legislación
La “Ley para Mejorar el Acceso a la Salud Mental del Departamento de Emergencias” fue enviada al Senado el año pasado para aliviar la presión sobre el sistema de salud de los Estados Unidos. La idea principal de este proyecto de ley es ayudar a las instalaciones médicas con personal médico capacitado y un departamento de emergencias a ayudar a las personas «que experimentan un episodio de salud mental aguda» en la sala de emergencias (Mejorando el acceso a la salud mental de la Ley del Departamento de Emergencias, 2021). Los beneficiarios de las subvenciones del gobierno en virtud de este proyecto de ley deben gastar fondos para apoyar y ampliar los programas de atención de emergencia para pacientes con episodios agudos de enfermedad mental. Las posibles medidas incluyen acelerar la colocación de los pacientes, expandir la infraestructura con proveedores regionales, aumentar el número de camas y salas psiquiátricas para pacientes hospitalizados y desarrollar enfoques nuevos y alternativos para el tratamiento y el apoyo al paciente (Mejorando el acceso a la salud mental de la Ley del Departamento de Emergencias, 2021). Un proveedor de salud calificado debe presentar una solicitud al Secretario de Salud y Servicios Humanos que describa los esfuerzos actuales y el uso previsto de los fondos.
Después de las lecturas, los borradores fueron remitidos al Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones. Esta unidad gubernamental tiene amplia jurisdicción, incluyendo educación, trabajo, salud, bienestar público y otros temas de desarrollo social (U.S. Government Accountability Office, 2015). Tiene una fuerte influencia en el sector de la salud derivada de su papel en la educación de las enfermeras durante los preparativos de la Segunda Guerra Mundial. El estado de “Mejorar el acceso a la salud mental desde la Ley del Departamento de Emergencias” está siendo revisado actualmente por el Comité (Mejorar el acceso a la salud mental desde la Ley del Departamento de Emergencias, 2021). El apoyo continuo del gobierno es esencial para resolver problemas de esta magnitud.
Problemas agudos de política de acceso a la salud mental
A pesar de la tendencia en el crecimiento y la propagación de enfermedades mentales, todavía existe un estigma asociado con tales trastornos en la sociedad. Solo el 22% de los jóvenes en los Estados Unidos que experimentan problemas mentales buscan asesoramiento y tratamiento oportunos, lo que significa que las enfermedades psicológicas en la mayoría de las personas tienden a dejarse sin tratamiento (Ijadi-Maghsoodi et al., 2018). Si una persona ignora el malestar psicológico y lo suprime, este factor puede resultar en condiciones psicológicas agudas. Los ataques de pánico y las rupturas psicóticas son comunes, lo que representa un peligro directo para la vida y la salud de una persona y quienes la rodean (Ijadi-Maghsoodi et al., 2018). El alivio de las condiciones que conducen a tales incidentes es fundamental para la seguridad pública.
Otra cuestión es la inaccesibilidad de los servicios sanitarios necesarios. El 68% de las personas con enfermedades mentales no pueden pagar el tratamiento y están buscando formas gratuitas de aliviar la angustia mental (Ijadi-Maghsoodi et al., 2018). La crisis de salud mental catalizada por la pandemia de coronavirus ha demostrado que el sistema de salud no está listo para hacer frente a los períodos que exacerban la enfermedad psicológica. La escasez de camas y personal en la atención de salud mental aguda y la baja cobertura de la misma por parte del seguro de salud han llevado a un aumento de la desigualdad en el acceso a la ayuda psiquiátrica (Moreno et al., 2020). Sin una solución de una magnitud adecuada, este problema alimenta otros problemas sociales. De 2005 a 2015, el 17% de las personas con afecciones mentales graves se suicidaron después de ser dados de alta de un departamento de emergencias (Tyler et al., 2019). La crisis en la prestación de servicios de salud mental ha alcanzado su punto máximo y requiere una intervención inmediata.
Pros y contras de la legislación
Los principales interesados de esta legislación son el estado, los clientes que necesitan asistencia psicológica y los proveedores de salud calificados. Este proyecto de ley ayudará a los hospitales con departamentos de emergencia a recibir fondos adicionales para expandir la atención de salud mental e implementar enfoques innovadores. Una mejor financiación debería conducir a una nueva ola de estudios sobre enfermedades mentales, y es probable que aparezcan nuevas opciones de tratamiento. Otra ventaja de este proyecto de ley incluye la mejora de la calidad de la atención médica para las personas que han experimentado un episodio agudo de enfermedad psicológica. Las estrategias modernas minimizarán las recaídas posthospitalarias y permitirán un mejor control de la condición del paciente. Además, el proyecto de ley recibió el apoyo de ambas partes, lo que indica la ausencia de desacuerdos en el estado y la sociedad sobre este tema (Mejorando el acceso a la salud mental de la Ley del Departamento de Emergencias, 2021). Una definición clara de los requisitos que la mayoría debe cumplir es también una de las ventajas del proyecto, ya que garantiza la efectividad del gasto del fondo. Las desventajas de la ley incluyen, tal vez, un conjunto demasiado estricto de requisitos, que solo los hospitales grandes pueden cumplir. Esto va en contra de la idea de expandir las oportunidades de salud mental en todo el país y es especialmente perjudicial para las poblaciones rurales. Es posible que muchas organizaciones que podrían comenzar a brindar atención psicológica y de salud mental no reciban fondos.
Declaración de posición sobre la legislación
Este proyecto de ley surge de una necesidad urgente que se está gestando en la sociedad estadounidense durante décadas y que ahora se ha convertido en un problema social importante. Es imposible no apoyar la iniciativa de ampliar las posibilidades de prestar asistencia psicológica, especialmente en situaciones agudas. En tales condiciones, las personas se vuelven peligrosas para sí mismas y para los demás y requieren la ayuda inmediata de especialistas. Para resolver la crisis, es crucial ampliar la cobertura del seguro para los casos en que las personas con trastornos mentales agudos no pueden pagar el tratamiento. Los legisladores deben reconsiderar sus opciones para otorgar asistencia financiera a un proveedor de salud calificado y qué instalaciones deben priorizarse. Puede ser beneficioso resaltar las oportunidades para que los proveedores más extensos y más pequeños implementen diferentes programas. Los hospitales grandes pueden participar en el desarrollo de programas innovadores y en la atención posthospitalaria. Se debe prestar especial atención a las partes más vulnerables de la población de acuerdo con las pruebas, ya que el aumento de las tasas de suicidio es un signo de problemas importantes. A su vez, también se debe priorizar evitar que las personas alcancen tales condiciones mentales. Por ejemplo, los proveedores de atención médica pequeños pueden ser guiados para calificar para los tipos más comunes de enfermedades mentales a través del apoyo financiero.
Conclusión
En conclusión, «Mejorar el acceso a la salud mental de la Ley del Departamento de Emergencias» es un documento vital que propone mejoras en la atención de la salud mental que hace mucho tiempo que deberían haberse realizado. En la situación en que las enfermedades psicológicas crecen y los problemas acumulados en el sistema de atención de salud mental no se abordan adecuadamente, es difícil sobreestimar la importancia y la puntualidad de este proyecto. El proyecto de ley tiene la oportunidad de beneficiar a todas las partes interesadas, desde los pacientes hasta la sociedad en general. El uso adecuado de los fondos puede conducir a enfoques innovadores que pueden probarse y replicarse. Sin embargo, la severidad y rigidez de la redacción con respecto a los beneficiarios de la subvención hacen que uno piense en las dificultades para implementar el proyecto y el posible fracaso para lograr sus objetivos en tales condiciones. Antes de que el proyecto de ley sea aprobado por el Congreso, es necesario que los legisladores consideren qué partes de la población son las más afectadas y qué soluciones las priorizarán más.