Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental

Introducción

El tema de la salud mental de las personas ha sido ampliamente discutido en los medios de comunicación en los últimos años. Hoy en día, la mayoría de las personas entienden el impacto significativo que tiene la salud mental en su vida y tratan de mantenerla en un estado adecuado. Sin embargo, hay poblaciones que a menudo no reciben el apoyo adecuado de salud mental a pesar de necesitar tal ayuda. Uno de esos datos demográficos son los reclusos y los delincuentes, tanto los que están confinados en las cárceles como los que están en libertad condicional o libertad condicional. Estados Unidos tiene la mayor tasa de reclusos por cada 100.000 habitantes en el mundo, lo que potencialmente indica la escala del problema existente en la esfera de la salud mental (Statista, 2021). Además, la falta de investigación sobre el tema del efecto de la salud mental en el comportamiento de los reclusos plantea varias preguntas importantes. Por ejemplo, sería interesante analizar si la presencia de condiciones de salud mental tiene algún vínculo con la tendencia de los reclusos a reincidir. Además, también es vital determinar si los planes de tratamiento ofrecidos a los reclusos en diferentes niveles tienen algún efecto positivo en su bienestar y comportamiento.

Tema de investigación, hipótesis y preguntas de investigación

En el presente documento se examina el fenómeno de la salud mental y sus efectos en la conducta de las personas condenadas a prisión. Específicamente, el tema de investigación del documento es “¿La salud mental de un individuo afecta las tasas de reincidencia en las cárceles o prisiones?” Aunque el tema no se investiga a fondo, es posible establecer una hipótesis. Por lo tanto, la hipótesis del documento actual es que las personas que sufren de enfermedades mentales tienen un mayor riesgo de recibir actividades delictivas. Para analizar el tema de una manera adecuada, es esencial confiar en preguntas de investigación claras. La primera pregunta para el estudio actual es la siguiente: «¿Los reclusos que sufren de enfermedades mentales tienen una tasa de reincidencia más alta que los reclusos que no tienen salud mental?» La segunda pregunta es: «¿Por qué los planes de tratamiento proporcionados a nivel estatal son más efectivos que los planes de tratamiento a nivel local?»

La reincidencia es un tema que es particularmente inherente al sistema de justicia penal estadounidense. Según las estadísticas, en los Estados Unidos, dentro de los tres años posteriores a la liberación de la prisión, dos de cada tres ex reclusos son arrestados nuevamente, mientras que más del 50% están encarcelados (Benecchi, 2021). Esos datos demuestran que hay un problema claro con la reincidencia en el país, que en cierta medida puede atribuirse a las condiciones que ofrece el sistema penitenciario. Esencialmente, la vida en prisión deja un impacto significativo en la salud física y mental de los reclusos. Si bien las instituciones penitenciarias de los Estados Unidos ofrecen servicios de atención médica a los presos, no los alientan a participar en actividades que promuevan la salud, como hacer ejercicio o tomar vitaminas. Como resultado, tales factores contribuyen en última instancia al empeoramiento de la salud de los reclusos y, posteriormente, aumentan su probabilidad de reincidencia en el futuro (Anderson et al., 2018). Esencialmente, la mala salud de los reclusos puede hacer que regresen a la cárcel después de la liberación.

Específicamente, la incapacidad de las personas para proteger su salud en prisión puede impulsar su reincidencia. Por ejemplo, el estudio realizado por Link et al. indicaron que las personas que experimentaron problemas de salud tenían más probabilidades de regresar a la cárcel que las que tenían un bienestar normal. La falta de asistencia por parte del sistema penitenciario en la prestación de servicios pertinentes de atención de la salud mental no es el único factor que contribuye a la reincidencia. Las personas que fueron liberadas recientemente de la prisión dependen en gran medida del apoyo emocional y material de sus familiares. Como resultado de la dependencia excesiva de los recursos de su familia, puede surgir un conflicto, empeorando la salud mental o provocando enfermedades mentales del prisionero recientemente liberado. La falta de apoyo de la familia y la ruptura de los lazos emocionales puede, a su vez, hacer que la persona vuelva a ofender.

Por lo tanto, queda claro que los problemas de salud juegan un papel importante en la probabilidad de que los delincuentes vuelvan a cometer delitos. La psicopatía es uno de los trastornos de salud mental más comunes entre la población carcelaria. El estudio de Anderson et al. reveló que la psicopatía era uno de los factores clave que contribuían a la reincidencia no violenta y general. Además, la investigación muestra que los reclusos que tienen un trastorno mental grave tienen más probabilidades de recidivar que los delincuentes con un diagnóstico menos grave (Bales et al., 2017). Tal evidencia indica claramente la influencia de los problemas de salud mental en la reincidencia entre los ex reclusos.

Tratamiento de salud mental para reclusos

Sobre la base del hecho de que los problemas de salud mental tienen un gran impacto en la reincidencia, es razonable introducir intervenciones para proporcionar servicios de atención médica a los reclusos necesitados. Una de las prácticas clave en la esfera del apoyo a la salud mental para los ex delincuentes es el método de gestión de casos. Esencialmente, la administración de casos se refiere a los servicios comunitarios prestados por profesionales o un equipo de especialistas que se brindan a aquellas personas que requieren atención de salud mental. Como se mencionó anteriormente, los ex reclusos a menudo sufren problemas considerables de salud mental y, por lo tanto, pueden calificar para problemas de gestión de casos. La investigación muestra que la gestión de casos puede mejorar la calidad de vida de los ex reclusos con enfermedades mentales y reducir su participación en actividades delictivas (Leutwyler et al., 2017). Además, la entrega de tales programas a nivel estatal, en contraposición a la local, es más efectiva ya que implica asignar más recursos y profesionales para ejecutar la iniciativa.

El tratamiento de los ex reclusos con problemas de salud mental tiene claras implicaciones positivas no solo para su bienestar sino también para la seguridad pública. Por lo tanto, se hace evidente que las intervenciones de salud mental deben introducirse a los primeros delincuentes de todas las edades. Por ejemplo, la investigación de Zeola et al. proporcionaron evidencia sobre el tema de la reducción de la reincidencia entre delincuentes juveniles a través de los servicios de atención médica pertinentes. Específicamente, los investigadores descubrieron que referir a los delincuentes jóvenes a los servicios de salud mental tuvo efectos positivos en la reducción del nivel de reincidencia, especialmente para los jóvenes afroamericanos (Zeola et al., 2017). Por lo tanto, las derivaciones universales a los servicios de salud mental pueden ser una herramienta eficaz para contrarrestar el problema de la reincidencia entre las personas con trastornos de salud mental.

La falta de atención médica mental adecuada en las comunidades es un factor que hace que los reclusos eviten abordar sus problemas. Por lo tanto, sería una decisión sensata por parte del estado introducir apoyo psiquiátrico a aquellas personas que están en libertad condicional y aquellos que tienen una sentencia de libertad condicional. Por ejemplo, Weatherburn et al. evaluar la efectividad del tratamiento de salud mental en el caso de los acusados que tenían una enfermedad psicótica. Los resultados indicaron que la intervención redujo significativamente el riesgo de mayor ofensa en la población en cuestión. La principal implicación de estos datos debe ser el desarrollo y la introducción de programas de salud mental financiados por el Estado para los ex delincuentes.

Recomendaciones

Sobre la base de la investigación presentada anteriormente, es posible hacer ciertas recomendaciones sobre cómo reducir la tasa de reincidencia para aquellos que sufren de una enfermedad mental. El elemento más importante de tales esfuerzos debe convertirse en la prestación de atención psiquiátrica en el caso de las sentencias de libertad condicional y libertad condicional. Para hacerlo, los delincuentes deben ser examinados durante el proceso de reserva para detectar sus trastornos de salud mental. Las intervenciones de tratamiento utilizadas en los delincuentes para abordar sus problemas de salud mental deben adaptarse a sus necesidades particulares. La investigación demuestra que las terapias más efectivas incluyen la psicofarmacología y la terapia cognitiva conductual (“cárceles federales”, 2018). Otro elemento esencial del sistema tiene que ser la asistencia de los organismos penitenciarios y las comunidades a los delincuentes liberados. Por ejemplo, estas organizaciones pueden ayudar a los reclusos a solicitar beneficios y programas de terapia. Esencialmente, la continuidad de la atención debe mantenerse incluso una vez que el delincuente sale de la prisión. Finalmente, debe haber una cooperación continua entre las agencias correccionales y los servicios comunitarios, lo que implica compartir información e intercambiar programas de tratamiento. Por lo tanto, sobre la base de las recomendaciones, se pueden lograr resultados positivos en la esfera de la lucha contra la reincidencia entre los delincuentes con problemas de salud mental.

Conclusión

La cuestión de la atención de la salud mental en el sistema penitenciario es crucial y debe abordarse adecuadamente. El documento actual ha demostrado la hipótesis principal de que las personas que sufren de trastornos mentales tienen un mayor riesgo de participar en la reincidencia. Además, se descubrió que los reclusos con condiciones de salud mental tienen más probabilidades de volver a ofender que aquellos sin tales problemas. Finalmente, los programas estatales para reducir la reincidencia entre los delincuentes con problemas de salud mental son más efectivos que los locales.

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Reference

LawBirdie. (2024, April 14). Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental. https://lawbirdie.com/es/reincidencia-entre-delincuentes-con-trastornos-de-salud-mental/

Work Cited

"Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental." LawBirdie, 14 Apr. 2024, lawbirdie.com/es/reincidencia-entre-delincuentes-con-trastornos-de-salud-mental/.

References

LawBirdie. (2024) 'Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental'. 14 April.

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1. LawBirdie. "Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental." April 14, 2024. https://lawbirdie.com/es/reincidencia-entre-delincuentes-con-trastornos-de-salud-mental/.


Bibliography


LawBirdie. "Reincidencia entre delincuentes con trastornos de salud mental." April 14, 2024. https://lawbirdie.com/es/reincidencia-entre-delincuentes-con-trastornos-de-salud-mental/.