La tecnología marca un progreso, pero la lenta introducción de gadgets innovadores en el trabajo por parte de las agencias de aplicación de la ley es extraña, ya que esto podría mejorar y facilitar muchos procesos. El artículo “Introducir modelos impresos en 3D como evidencia demostrativa en juicios penales” destaca un precedente en el que se utilizó un modelo impreso en 3D como evidencia y ayudó a la investigación. El trabajo llama la atención sobre el tema más urgente de la evidencia impresa en 3D en las investigaciones penales para la toma de decisiones, teniendo en cuenta la validez de la implementación de las innovaciones.
La impresión 3D es un término genérico que abarca una gama de tecnologías aditivas que crean modelos físicos a partir de archivos digitales. Los beneficios de dicha evidencia están demostrando su potencial en todo el mundo (Brandl, 2017). El artículo cita un uso exitoso de materiales impresos en 3D como evidencia de demostración en un juicio por asesinato, uno de los primeros casos de este tipo en el Reino Unido en ser reportado en la literatura científica.
Durante el juicio por asesinato, dos hombres fueron acusados de golpear a su víctima hasta la muerte. La investigación de este crimen incluyó una tomografía microcomputada del cráneo de la víctima, que ayudó al patólogo a determinar las circunstancias del ataque. Era importante averiguar el número de armas para el ataque y los artistas (Baier et al., 2018). Los escaneos revelaron dos formas diferentes de daño que involucraban dos tipos de armas o un arma con superficies geométricamente diferentes. Posteriormente, esto sirvió de base para la impresión 3D y se presentó como evidencia física, lo que clarificó la investigación.
La evidencia digital 3D es una herramienta poderosa para aclarar el testimonio de expertos y reducir la confusión potencial asociada con la evidencia científica o médica. El uso de la innovación en los tribunales es relevante, proporcionando así al jurado los mejores medios posibles para llegar a un veredicto informado. Sin embargo, los autores concluyen que los modelos físicos deben usarse con precaución y en los casos en que sea real para complementar la evidencia existente. Es imposible negar que la tecnología es el futuro, y la innovación en los procedimientos de investigación criminal mejorará el sistema familiar establecido. Por el momento, se necesita un poco más de tiempo para probar el papel de los modelos impresos en 3D, y la implementación es posible.