Teoría de la tensión y teoría de la anomia de Merton
Introducción
Diversas teorías tratan de explicar los crímenes, quién los perpetra y por qué las fuerzas impulsoras hacen que los perpetradores cometan crímenes. Estas teorías se subdividen en categorías según las razones por las que se cometen los delitos. La teoría de la tensión y la teoría de la anomia de Merton buscan explicar las razones sociales detrás de los actos criminales. Este ensayo discutirá estas dos teorías y su aplicación a la justicia penal.
Teoría de Cepas
La teoría de la tensión afirma que los objetivos personales están limitados por los medios socialmente aceptables para alcanzarlos, creando así una tensión. Según esta teoría, cada persona tiene objetivos asociados con clases sociales y estados, en términos de reconocimiento social, reconocimiento cultural, bienestar económico y estado político. Los medios sociales aceptados para adquirir estos objetivos incluyen el ahorro, la educación y el trabajo duro (Siegel, 2011). Algunas personas son capaces de alcanzar estos objetivos dentro de los medios socialmente aceptables, mientras que otros no tienen los medios para vivir estos objetivos.
Aquellos que no tienen los medios pueden adaptarse a la situación utilizando cinco modos sugeridos. La conformidad como modo de adaptación sugiere que la persona también acepta los medios y las metas. La innovación sugiere que para adaptarse a la tensión de la gente puede aceptar los objetivos, pero no los medios. Otra forma posible de adaptarse al estrés ocurre en el retiro por el cual una persona niega tanto los objetivos como los medios. En el ritualismo, un modo de adaptarse a la tensión, una persona acepta los medios, pero ya no persigue los objetivos (Anderson, Dyson, Langsam, & Brooks, 2007). El modo de adaptación utilizado depende de las reacciones individuales a los sentimientos resultantes de la tensión.
Teoría de la Cepa y Crimen
Según la teoría de la tensión, las fuentes de tensión son el fracaso para alcanzar objetivos, la disyunción de expectativas y logros, la falta de estímulos positivos y los encuentros de estímulos negativos. Las fuentes mencionadas anteriormente conducen a la ira, la frustración, el miedo, la depresión y la decepción. Como resultado de estos sentimientos, la persona que experimenta una tensión puede disfrutar de comportamientos antisociales como la violencia, el robo, el abuso de drogas y la delincuencia (Siegel, 2011). Algunos de los comportamientos antisociales que resultan de la tensión pueden ser criminales, en contra de las leyes y regulaciones estatales.
Opinión personal sobre la teoría de la tensión y el crimen
Hasta cierto punto, la teoría de la tensión explica la causa de los actos criminales y la existencia de una carrera criminal, pero no es adecuada. La teoría afirma que las personas se entregan a los crímenes debido a las frustraciones, los sentimientos de ira y la privación. El crimen es más que solo emociones, es un proceso cognitivo en el que el criminal toma decisiones. Las fuentes de tensión se pueden manejar de otras maneras que no sean caer en delitos. La falta de satisfacción de los objetivos personales sólo contribuirá a los actos delictivos cuando las personas involucradas recurren a actividades delictivas.
Teoría de la anomia de Merton
La palabra anomia fue adaptada por el sociólogo Robert Merton de Emile Durkheim, y significa falta de control en una sociedad. Es creado por el cambio social en el que la tradición, los valores y las creencias de la sociedad que la mantienen unida se rompen debido al cambio. La sociedad todavía puede mantenerse unida, pero por otras fuerzas como la interdependencia entre sus miembros. La existencia de la anomia crea una sociedad anómica que tiene una pequeña función de control social. En una sociedad anómica, las personas no se mantienen unidas por sus valores y creencias sociales, sino por sus propios beneficios de sus relaciones sociales (Anderson, Dyson, Langsam, & Brooks, 2007).
La teoría de Merton sobre la anomia y el crimen
Robert Merton aplicó las ideas de Emile Durkheim en la anomia a la criminología. Sugirió que el cambio rápido en los entornos sociales y el clima puede conducir a la desviación de los comportamientos estipulados y esperados. Por ejemplo, si la forma de ganar de una persona se denomina ilegal debido a cambios en la constitución, pueden recurrir a actos ilegales que servirán como medios alternativos de ingresos. Una vez que ocurren los cambios sociales, hay una tensión que provoca que algunas personas en la sociedad adopten comportamientos inaceptables. Estos comportamientos inaceptables incluyen pandillas y formaciones grupales que pueden violar las leyes para lograr sus objetivos establecidos y las personas que recurren a carreras criminales (Siegel, 2011).
Opinión personal sobre la teoría de Merton de la anomia y el crimen
El cambio social no le da a la gente el derecho de dedicarse a actividades delictivas, simplemente crea una situación de carencia. La forma en que una persona reacciona a una situación es puramente personal y no debe atribuirse únicamente a la anomia. Las personas se entregan a actividades delictivas porque se niegan a aceptar el cambio y sus capacidades. Las anomalías crean un cambio en el entorno, y afecta a todas las personas en ese entorno, pero no todas las personas afectadas se entregan negativamente a los delitos. La anomia contribuye al crimen creando una situación de deseo, pero son las personas las que recurren a los actos criminales.
Conclusión
Hay muchas causas de actos criminales, que pueden explicarse en teorías como la teoría de la tensión y la teoría de la anomia de Merton. Las causas del crimen pueden ser el resultado de frustraciones personales como afirma la teoría de la tensión. El cambio en la forma de operar de una sociedad también puede causar que los individuos en la sociedad resulten en actos criminales. Las causas de los actos delictivos solo contribuyen a los actos delictivos al crear una situación de carencia, pero la elección de participar en actividades delictivas recae únicamente en un individuo.