Derechos de los reclusos por el aire acondicionado en las cárceles de EE.UU.
La mayoría de la gente estaría de acuerdo en que los presos merecen condiciones de vida y vivienda seguras. Sin embargo, este no es el caso en la mayoría de las prisiones y cárceles de los Estados Unidos, ya que la mayoría no tiene aire acondicionado, que es esencial para la salud de los humanos, especialmente durante temperaturas extremas. La mayoría de los presos se quejan de calor intenso durante el verano, y algunos están expuestos al peligro de sufrir enfermedades relacionadas con el calor. Prisioneros de todo Estados Unidos se quejan de que se ven obligados a perseverar con condiciones que probablemente perjudiquen su salud, como el calor extremo o el frío. Blinder explica esta situación: «Los abogados y médicos de los reclusos describieron condiciones similares dentro de otras cárceles en el sur, y algunos dijeron que las temperaturas pusieron en peligro la vida de los presos con problemas de salud». Las condiciones en la mayoría de las cárceles y prisiones incluyen la falta de aire acondicionado que expone a los presos a un gran calor. Algunos presos, especialmente aquellos con problemas de salud, tienen que conseguir que sus médicos y abogados aboguen por que se les coloque en celdas con aire acondicionado, lo cual es una necesidad médica. La defensa de la reforma penitenciaria se centra en los derechos y el bienestar de los reclusos, incluido su entorno mientras están en la cárcel. La defensa se guía por la Octava Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, que prohíbe el encarcelamiento en condiciones de calor o frío extremos. Sin embargo, los funcionarios de la prisión justifican la falta de aire acondicionado y afirman que los presos deben utilizar duchas frías y la disponibilidad de ventiladores y líquidos abundantes para controlar el calor. Además, los funcionarios afirman que la instalación de sistemas de refrigeración es prohibitivamente costosa, especialmente en instalaciones más antiguas. Sin embargo, los reclusos tienen derechos humanos como otros; por lo tanto, sus derechos no deben ser violados a pesar de que están encarcelados por cometer crímenes contra la sociedad. Específicamente, los reclusos tienen derecho a ser encerrados en habitaciones equipadas con aire acondicionado y aptas para su salud, ya que cumplen con su castigo por los crímenes que cometieron. Además, su salud debe ser priorizada y no el castigo al que están sirviendo.