Terrorismo nacional e internacional
Introducción
El terrorismo es uno de los temas de actualidad que los países enfrentan en todo el mundo, y diseñar diferentes estrategias para contrarrestarlo. Sin embargo, cada año se producen varios ataques terroristas a pesar de que los gobiernos asignan miles de millones de dólares a diversas medidas de seguridad. En el mundo moderno, las amenazas terroristas pueden ser planteadas tanto por locales como por extranjeros, lo que hace que los organismos encargados de hacer cumplir la ley distingan entre el terrorismo nacional e internacional. Según el FBI, el terrorismo doméstico se refiere a actos violentos cometidos por personas que persiguen objetivos de diversas influencias domésticas, como movimientos o partidos («Terrorismo», s.f.). El terrorismo internacional, a su vez, puede describirse como actos violentos cometidos por individuos inspirados o asociados con organizaciones extranjeras (“terrorismo”, s.f.). Al mismo tiempo, el terrorismo internacional y nacional a menudo comparten similitudes y diferencias en términos de tácticas, objetivos e ideología. El acto internacional de terrorismo, el atentado contra el World Trade Center en 1993, y el acto interno de terrorismo, el atentado de Oklahoma City en 1995, son ejemplos apropiados para comparar los dos tipos de terrorismo.
Tácticas empleadas
Los dos actos terroristas mencionados anteriormente tenían una táctica similar que se basaba en la realización de un bombardeo. Esencialmente, en el caso del evento de 1993, los terroristas detonaron una bomba que estaba oculta en un camión estacionado debajo del World Trade Center (Martin, 2020). Del mismo modo, el bombardero de Oklahoma City de 1995 usó un camión grande como medio para transportar la bomba y detonarla sin llamar la atención de nadie (Martin, 2020). Esencialmente, la táctica utilizada por ambos tipos de terroristas era similar porque la bomba es el arma más destructiva que se puede hacer en casa sin ningún equipo especial o profesional. Las bombas son extremadamente poderosas, y pueden matar al mayor número de personas en el período más corto sin exponer a los terroristas a ningún peligro.
Objetivos elegidos
Otra similitud entre los dos tipos de terroristas son los lugares a los que se dirigen, a saber, las zonas densamente pobladas. En el caso del atentado de 1993, los terroristas atacaron el World Trade Center, uno de los rascacielos más altos del mundo y, por lo tanto, un lugar con una alta concentración de personas (Martin, 2020). En el incidente de 1995, el bombardero atacó el Edificio Federal Alfred P. Murrah, que también albergaba a muchas personas (Martin, 2020). Esencialmente, en ambos casos, los terroristas tenían la intención de llevar a cabo su acto violento en una zona donde el número máximo de personas se verían afectadas por el bombardeo. Por lo tanto, además de elegir el arma más poderosa, los terroristas tienden a atacar las partes más densamente pobladas de las ciudades.
Ideología
La ideología es la principal diferencia entre los terroristas internacionales y nacionales, que se describió anteriormente. Los terroristas del World Trade Center de 1993 se adhirieron a la idea del Islam radical y abrazaron puntos de vista antioccidentales que se oponen al apoyo de los Estados Unidos a Israel (Clarke, 2018). El atacante de Oklahoma City, Timothy McVeigh, apoyó el movimiento antigubernamentales Patriot y decidió llevar a cabo un ataque en respuesta a la redada del gobierno en Waco (Clarke, 2018). Por lo tanto, la diferencia en la ideología de los terroristas se deriva de sus puntos de vista. Mientras que los atacantes de 1993 eran fundamentalistas musulmanes, Timothy McVeigh era un anarquista y una persona que se oponía al gobierno federal. Además, los bombarderos del incidente de 1993 se asociaron con organizaciones extranjeras, mientras Timothy McVeigh perteneció al movimiento Patriot doméstico.
Reacción del Gobierno de EE.UU.
El gobierno de los Estados Unidos tuvo reacciones significativas en respuesta a ambos incidentes. Por ejemplo, después del atentado de 1993, el gobierno participó activamente en la búsqueda del autor principal, que incluso involucró al Servicio de Seguridad Diplomática. La policía de Nueva York y el FBI arrestaron a la mayoría de los terroristas justo después del ataque. Además, el Departamento de Estado ofreció una recompensa de $ 2 millones por información que conduzca al arresto de Ramzi Yousef, el conductor del camión (“1993 World Trade Center”, 2019). La reacción fue similar en repeticiones al ataque de 1995, el FBI, en cooperación con la policía local, arrestó a Timothy McVeigh, quien fue detenido después de colocar la bomba por llevar un arma no registrada (Clarke, 2018). Por lo tanto, los organismos gubernamentales de todos los niveles participaron activamente para garantizar que los terroristas recibieran su castigo.
Cobertura de medios
La cobertura mediática de ambos eventos fue global, ya que ataques terroristas tan grandes, especialmente el de Oklahoma City, fueron un fenómeno nuevo para los países occidentales y los Estados Unidos en particular. También hubo varias cuestiones relacionadas con la actividad de los periodistas que cubrían los dos eventos. Por ejemplo, después del ataque de 1993, uno de los periódicos de Nueva York publicó información exclusiva sobre un nuevo sospechoso, que fue puesto bajo vigilancia por la Policía. Como resultado de la publicación, tuvo que ser arrestado prematuramente, lo que erradicó la posibilidad de que llevara a la Policía a otros sospechosos. Además, el ataque de 1993 influyó en la percepción mediática de 1995. Esencialmente, después del bombardeo en 1995, los medios de comunicación comenzaron a promover la idea de una conexión árabe. Por lo tanto, todos los ataques terroristas comparten la similitud de estar ampliamente cubiertos por numerosos medios de comunicación en todo el mundo.
Conclusión
Por lo tanto, la principal diferencia entre el terrorismo nacional e internacional es la noción de que el primero está dirigido por personas asociadas con organizaciones o ideologías locales, mientras que el segundo se refiere a personas que actúan en nombre de organizaciones extranjeras. Como resultado, los terroristas nacionales e internacionales suelen apoyar diferentes puntos de vista. El terrorismo internacional y nacional son vistos como diferentes fenómenos por las agencias de aplicación de la ley, como el FBI, así como el gobierno.